El dolor o neuralgia intercostal es una dolencia que, con frecuencia, está relacionada con una patología de los músculos, costillas o nervios intercostales. Se caracteriza por una sensación aguda que causa dolor, hipomovilidad e, incluso, dificulta la respiración. Estos síntomas y dificultad para el movimiento pueden afectar a la calidad de vida. En este artículo de POR UNA VIDA ACTIVA conoceremos las principales causas de la contractura intercostal y otras patologías que causan dolor intercostal, su diagnóstico, tratamiento y la fisioterapia recomendada.
Anatomía del tórax y la zona de las costillas
El tórax también es conocido como la caja torácica. Es una estructura ósea que cumple una función muy importante en el cuerpo humano ya que protege los órganos vitales como el corazón y los pulmones.
El tórax está formado por las costillas, el esternón y las vértebras torácicas. A su vez, estas estructuras están revestidas por músculos intercostales y nervios que las recorren.
Una costilla es un hueso curvo y plano que se une al esternón en la parte delantera y a las vértebras de la columna vertebral en la parte posterior. La flexibilidad de la costilla permite la expansión y la contracción del tórax y, con ello, la respiración.
En la parte posterior del tórax encontramos las vértebras torácicas, que forman la columna vertebral y que proporcionan soporte y protección a la médula espinal.
En el tórax también encontramos nervios intercostales. Un nervio intercostal se encarga de recorrer el espacio entre las costillas proporcionando sensibilidad y permitiendo el control de los músculos.
Cuando un nervio intercostal sufre irritación o compresión se denomina neuralgia intercostal. La neuralgia intercostal origina dolor agudo en la zona afectada. También puede originar sensación de quemazón en la zona recorrida por el nervio intercostal.
El nervio más importante de la zona es el nervio vago, ya que controla funciones autónomas como la digestión o la respiración. Por ello, el nervio vago atraviesa el tórax y se ramifica en diferentes direcciones para llegar a órganos y tejidos.
En el lateral del tórax se encuentran los músculos intercostales tanto externos como internos. Estos músculos ayudan a expandir y contraer la caja torácica en la inhalación y la exhalación que realizamos al respirar.
Los músculos del tórax trabajan de manera conjunta con el diafragma, que es el principal músculo respiratorio.
El diafragma separa la cavidad torácica de la abdominal. Este músculo ayuda a la movilización durante la respiración. Se contrae durante la inhalación, lo cual crea un vacío en los pulmones que permite la entrada de aire. En la exhalación, el diafragma se eleva y ayuda a expulsar el aire de los pulmones.
Otra función del diafragma está relacionada con la digestión al influir en la presión intraabdominal.
¿Por qué se produce dolor intercostal?
La zona de la caja torácica y la región del tórax son zonas con propensión a lesiones y dolencias debido a su anatomía y función en el cuerpo.
Las causas más comunes de dolor intercostal son:
- Contractura intercostal (afecta a la musculatura).
- Esguince
- Neuralgia intercostal.
- Compresión o pinzamiento de los nervios intercostales.
- Calambre intercostal.
- Traumatismo o golpe en la región de las costillas.
- Alteraciones de las vértebras o la columna vertebral en la zona del tronco.
- Fractura de costilla.
¿Qué es la neuralgia intercostal?
La neuralgia intercostal es una patología que cursa con la sensación de dolor en la zona de las costillas.
Los dolores originados por la neuralgia intercostal se caracterizan por ser agudos y punzantes. Pueden deberse a un pinzamiento o a enfermedades de los nervios intercostales, que son los nervios que se extienden a lo largo de las costillas.
Un pinzamiento de los nervios intercostales es una afección que causa dolor y se origina por la compresión o irritación de los nervios entre las costillas. El pinzamiento o compresión puede generar síntomas como sensación punzante, con quemazón y entumecimiento a lo largo del nervio intercostal afectado.
Otros síntomas de la inflamación o irritación de los nervios intercostales son la sensación de calambre a lo largo del recorrido del nervio intercostal. Estas molestias de la neuralgia intercostal pueden ser constantes o intermitentes y empeorar al realizar actividad física (especialmente si implica movimientos del tronco), con la respiración profunda o con la tos.
Con menor frecuencia, la neuralgia intercostal puede estar causada por patologías como el herpes zóster o ser consecuencia de una cirugía torácica previa.
¿Qué es calambre intercostal?
Un calambre intercostal es una contracción repentina y dolorosa de los músculos que se encuentran entre las costillas.
El calambre intercostal puede estar causado por movimientos bruscos, por tensión muscular o por la realización de un esfuerzo excesivo.
Para el alivio de los síntomas del calambre intercostal es necesario realizar reposo y ejercicios de estiramiento suaves.
¿Qué es la contractura intercostal?
La contractura intercostal es una contracción involuntaria de la musculatura localizada entre las costillas. La causa puede ser la realización de un movimiento brusco, adoptar malas posturas o realizar un esfuerzo excesivo.
El principal síntoma de la contractura intercostal es el dolor punzante y localizado en la zona de las costillas. Este dolor empeora al realizar una respiración profunda, al hacer movimientos con el tronco o al hacer presión sobre la costilla.
¿Qué es el esguince intercostal?
El esguince intercostal es una patología que se produce en la musculatura o los ligamentos que unen las costillas. Las causas más frecuentes son los movimientos bruscos o un traumatismo o golpe que impacte en la musculatura del lateral del tórax.
El principal síntoma del esguince intercostal es el dolor agudo con la respiración profunda o al realizar movimientos con el tronco.
Es importante indicar la diferencia entre la contractura intercostal y el esguince intercostal, ya que son patologías diferentes, pero con molestias similares. La contractura intercostal implica una contracción involuntaria de la musculatura que se encuentra entre las costillas, mientras que el esguince se debe a una lesión de los tejidos blandos.
En ambos casos, como hemos comenzado, los síntomas son similares y el dolor se hace más agudo con la respiración y los movimientos.
¿Qué es la fractura de costilla?
Una fractura de costilla es una lesión que se da como resultado de un traumatismo o golpe directo en la región del tórax. Las causas más frecuentes son las caídas, los accidentes de coche o los impactos en el deporte.
La fractura de costilla presenta síntomas como dolor intenso al respirar, al toser o al moverse. Con frecuencia, la fractura de costilla dificulta la respiración y la movilidad.
Diagnóstico de las dolencias intercostales
Todo paciente que acuse alguna dolencia intercostal debe acudir al médico especialista para su correcto diagnóstico y establecer el tratamiento más adecuado para aliviar los síntomas.
Para el diagnóstico médico, se realizan pruebas que incluyen la historia clínica del paciente y evaluación de la movilidad y sensibilidad.
Adicionalmente, se podrán realizar pruebas de imagen (como la radiografía o la resonancia magnética) para descartar una posible fractura u otras lesiones de los huesos y músculos de la región costal.
Una vez establecido el correcto diagnóstico y las causas del dolor intercostal, se procederá a establecer el tratamiento más adecuado y, en casos necesarios, un plan de fisioterapia.
Tratamiento del dolor intercostal
- La primera medida debe ser el reposo. Es importante reducir, en la medida de lo posible, los movimientos del tronco. El objetivo es reducir la tensión en los músculos y nervios afectados.
- Tratamiento con medicamentos antiinflamatorios y analgésicos para aliviar el dolor y la inflamación.
- Terapia con aplicación de frío y calor local para aliviar el dolor.
- Fisioterapia: Una vez superada la fase aguda, se procederá al tratamiento con actividad física acompañado por un fisioterapeuta:
- El fisioterapeuta realizará masajes al paciente para mejorar el movimiento, relajar la tensión muscular y mejorar la circulación sanguínea.
- El fisioterapeuta acompañará al paciente en la realización de ejercicios de fortalecimiento, estiramiento y movilidad, tanto de la columna vertebral como de toda la región costal.
- En el tratamiento de la fractura de costilla suele ser necesaria la inmovilización hasta que la fractura sane. En casos graves, podría ser necesario el uso de vendajes o corsés.
El tratamiento de las dolencias intercostales debe ser tratado de manera integral para asegurar la recuperación completa y evitar recurrencias y complicaciones a largo plazo.
Otros consejos para el tratamiento y prevención de la contractura intercostal
El tratamiento de las enfermedades y dolor de la zona intercostal debe tener un enfoque integral con la colaboración del médico, el paciente y el fisioterapeuta. El objetivo es lograr la recuperación completa y prevenir recurrencias en un futuro.
- Para prevenir lesiones o patologías de la región costal:
- Comienza tus entrenamientos con un calentamiento adecuado.
- Evita los movimientos bruscos.
- En caso de practicar deportes de impacto, equípate con la protección adecuada, también en la zona de las costillas.
- Completa tus rutinas de entrenamiento con ejercicios de fuerza, también del tronco, espalda y abdominales.
- Terminas tus entrenamientos con ejercicios de estiramiento y movilidad. Realiza los movimientos de manera suave y controlada.
- En caso de presentar enfermedades, lesión o dolor intercostal:
- Acude a tu médico para establecer el diagnóstico y tratamiento adecuado.
- Recurre a un fisioterapeuta para realizar ejercicios de fisioterapia que ayuden a la recuperación.
- Los analgésicos y antiinflamatorios orales y tópicos ayudan al alivio del dolor y la inflamación.
- Aplicar calor en la zona de las costillas afectada ayuda a reducir la tensión muscular y, con ello, al alivio del dolor.
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