La manzanilla es una de esas plantas que es común encontrar en los hogares de muchas personas, normalmente en forma de infusión. Su consumo se remonta a siglos atrás, y hoy en día sigue siendo valorada por sus múltiples beneficios. Desde calmar el cuerpo hasta aliviar pequeñas molestias digestivas, las propiedades de la manzanilla son apreciadas tanto por quienes buscan una opción natural como por aquellos que disfrutan de una bebida reconfortante al final del día. En este artículo de POR UNA VIDA ACTIVA vamos a conocer los compuestos de la manzanilla que le confieren sus propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y calmantes entre otros efectos.
¿Qué es la manzanilla?
La manzanilla es una planta que pertenece a la familia de las asteráceas. Existen diferentes variedades, siendo la Chamaemelum nobile una de las especies más comunes en infusiones. Esta planta es nativa de Europa y algunas partes de Asia y ha sido utilizada durante generaciones por sus efectos calmantes.
La camomila, como también se le conoce, se ha extendido por todo el mundo, y hoy en día es un componente esencial en muchas preparaciones naturales e infusiones.
Las flores de manzanilla son pequeñas y blancas, y se secan para preparar la clásica infusión de manzanilla. Su aroma suave y dulce hace que sea una opción muy popular para quienes buscan relajarse o mejorar su digestión de manera sencilla.
¿Cuáles son los componentes de la manzanilla?
Lo que hace especial a la manzanilla no es solo su aroma o sabor, sino los compuestos naturales que contiene que son los que le proporcionan las propiedades de la manzanilla.
Dentro de sus flores se encuentran elementos como los flavonoides, terpenoides y otros antioxidantes que le otorgan sus propiedades antiinflamatorias y calmantes. Estos componentes ayudan a combatir el estrés oxidativo y pueden ser beneficiosos para la salud general de las células del cuerpo:
Flavonoides
Los flavonoides son compuestos antioxidantes que se encuentran en muchas plantas, además de la manzanilla. Ayudan a proteger las células del daño causado por los radicales libres, lo que contribuye a reducir la inflamación y el estrés oxidativo en el cuerpo. En las propiedades de la manzanilla, los flavonoides también juegan un papel clave en sus efectos calmantes, favoreciendo la relajación y mejorando la calidad del sueño.
Terpenoides
Los terpenoides son compuestos que se encuentran principalmente en los aceites esenciales de la manzanilla. Estos compuestos son responsables de muchas de las propiedades medicinales atribuidas a la planta, como su acción antiinflamatoria y antimicrobiana. Los terpenoides también contribuyen al aroma característico de la manzanilla y a sus efectos relajantes sobre el sistema nervioso.
Ácido cafeico
Este antioxidante es otro compuesto que juega un papel importante en las propiedades de la manzanilla. El ácido cafeico ayuda a combatir el daño oxidativo en las células, lo que puede ser beneficioso tanto para la salud interna como externa del cuerpo. Además, tiene propiedades antiinflamatorias que complementan el efecto calmante de la manzanilla.
Ácido clorogénico
Similar al ácido cafeico, este compuesto antioxidante se encuentra comúnmente en plantas y es bien conocido por su capacidad para reducir la inflamación. En la manzanilla, el ácido clorogénico también contribuye a mejorar la digestión, ayudando a reducir los síntomas de indigestión y molestias estomacales leves.
Bisabolol
Este compuesto es uno de los terpenoides más activos en la manzanilla y es responsable de muchas de sus propiedades calmantes y antiinflamatorias. El bisabolol tiene efectos cicatrizantes y antimicrobianos, por lo que es útil para el tratamiento de irritaciones en la piel. También ayuda a calmar el sistema digestivo y a reducir la inflamación.
Camazuleno
El camazuleno es un compuesto aromático que se produce durante la destilación del aceite esencial de manzanilla. Es conocido por sus efectos antiinflamatorios y antioxidantes, y es especialmente beneficioso para calmar la piel irritada o sensible. Este componente también juega un papel en el alivio de los síntomas asociados con la inflamación digestiva.
Apigenina
La apigenina es un flavonoide presente en la manzanilla que actúa como un potente antioxidante. Este compuesto tiene propiedades ansiolíticas y calmantes, lo que ayuda a reducir el estrés y mejorar la calidad del sueño. La apigenina también es conocida por su capacidad para inducir la relajación muscular suave, siendo útil para aliviar la tensión física y mental.
Quercetina
La quercetina es otro flavonoide con potentes propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. En la manzanilla, ayuda a proteger las células del daño oxidativo, favorece la salud del sistema inmunológico y reduce la inflamación. Además, la quercetina tiene efectos beneficiosos sobre el sistema cardiovascular y puede contribuir a la reducción del riesgo de enfermedades crónicas.
Luteolina
La luteolina es un flavonoide que actúa como antioxidante y antiinflamatorio. En la manzanilla, este compuesto ayuda a calmar la inflamación en el sistema digestivo y la piel, y también puede contribuir a los efectos relajantes de la planta. La luteolina se ha estudiado por su potencial para reducir el estrés oxidativo y proteger las células del daño a largo plazo.
Ácidos fenólicos
Los ácidos fenólicos son compuestos antioxidantes que ayudan a proteger el cuerpo contra el estrés oxidativo. En la manzanilla, estos ácidos contribuyen a su capacidad para mejorar la digestión y aliviar las molestias estomacales, así como a reducir la inflamación general.
Cumuarinas
Las cumarinas son compuestos químicos presentes en la manzanilla que tienen propiedades anticoagulantes leves y efectos antiinflamatorios. Estos compuestos pueden ayudar a mejorar la circulación sanguínea y reducir la inflamación interna y externa. Sin embargo, debido a sus efectos anticoagulantes, es importante consumir manzanilla de forma moderada si se toman medicamentos para la coagulación.
Además, la manzanilla contiene pequeñas cantidades de vitaminas y minerales que complementan su perfil nutricional. Aunque no es una fuente principal de nutrientes, su riqueza en antioxidantes hace que sea valorada para el cuidado tanto interno, como externo.
Vitamina C
Aunque no es una fuente principal, la manzanilla contiene pequeñas cantidades de vitamina C, un antioxidante esencial para el sistema inmunológico. Esta vitamina ayuda a proteger las células, favorece la cicatrización de heridas y mejora la capacidad del cuerpo para combatir infecciones.
Vitamina A
La manzanilla también contiene pequeñas cantidades de vitamina A, que es crucial para la salud ocular, el crecimiento celular y el sistema inmunológico. Además, esta vitamina contribuye a mantener la piel saludable y puede ayudar en la reparación de tejidos.
Minerales
La manzanilla contiene trazas de minerales como el potasio, el magnesio y el calcio, que son importantes para mantener la salud general del cuerpo. Aunque las cantidades no son significativas, contribuyen al perfil nutritivo de esta planta.
¿Cuáles son las principales propiedades de la manzanilla?
Entre las propiedades de la manzanilla, las más destacadas son su capacidad para calmar y relajar el cuerpo y la mente. Se le atribuyen efectos antiinflamatorios suaves, lo que puede ayudar a reducir la inflamación interna y externa en ciertos casos. También es conocida por aliviar molestias estomacales leves, como los gases o la sensación de pesadez.
Otro aspecto importante de la manzanilla es su capacidad para mejorar el sueño. En caso de insomnio o si te cuesta relajarte antes de dormir, una infusión de manzanilla puede ayudarte a mejorar tu descanso.
- Calmante: ayuda a reducir el estrés y la tensión acumulada.
- Digestiva: alivia los problemas estomacales menores, como la indigestión o los cólicos.
- Antioxidante: protege las células del daño causado por los radicales libres.
- Propiedades antiinflamatorias: Sus compuestos pueden reducir inflamaciones leves.
Usos comunes de la manzanilla
Debido a las propiedades de la manzanilla, esta planta tiene múltiples usos. Desde su versión más conocida como infusión, hasta productos tópicos para la piel, esta planta puede formar parte de tu día a día de diferentes maneras.
Infusión o té
la forma más tradicional y popular de consumirla. Se suele tomar caliente, en una taza, tras las comidas o antes de dormir.
La infusión de manzanilla ha sido utilizada durante siglos en la medicina tradicional como un remedio para aliviar pequeñas molestias digestivas y promover la relajación.
Aceites esenciales y cosméticos
la manzanilla es utilizada en muchos productos cosméticos por sus propiedades calmantes y su capacidad para reducir irritaciones en la piel.
Baños relajantes
Algunas personas añaden flores de manzanilla secas al agua del baño para disfrutar de sus efectos relajantes a nivel tópico.
Cómo tomar la manzanilla
Para preparar una buena infusión que conserve todas las propiedades de la manzanilla, solo necesitas añadir una o dos cucharaditas de flores de manzanilla secas en agua caliente y dejar reposar durante unos minutos. Esto extraerá los compuestos beneficiosos de las flores y te permitirá disfrutar de todos sus beneficios en cada sorbo.
Si prefieres bebidas de té ya preparado, asegúrate de elegir una opción de calidad. También puedes disfrutar de combinaciones de infusiones que mezclen la manzanilla con otras plantas para potenciar sus efectos.
El té de manzanilla es una opción popular en la nutrición diaria debido a sus múltiples beneficios para la salud. Además de ser una bebida reconfortante, algunos estudios sugieren que puede ser útil para problemas de salud como personas con diabetes tipo 2, ya que puede contribuir a regular los niveles de azúcar en la sangre cuando se combina con una dieta adecuada.
La manzanilla es una planta que ha sido utilizada durante siglos, y su infusión también puede mezclarse con otros ingredientes naturales, como rodajas de manzana, para añadir un toque de sabor y potencialmente potenciar sus beneficios antioxidantes. Tanto el té de manzanilla como el uso de la manzana en preparaciones saludables ofrecen una forma natural de mejorar la digestión y complementar una alimentación equilibrada.
Beneficios de la manzanilla para tu bienestar
El consumo regular de infusión de manzanilla puede aportar varios beneficios para la salud:
Relajación
La manzanilla tiene efectos calmantes que ayudan a reducir la ansiedad y el estrés, promoviendo un estado de relajación. Consumirla antes de dormir también puede mejorar la calidad del sueño y favorecer un descanso reparador.
Mejora de la digestión
Después de comidas pesadas, una infusión de manzanilla facilita la digestión al relajar los músculos del tracto gastrointestinal. También ayuda a aliviar gases y a prevenir molestias como la acidez.
Cuidado de la piel
Gracias a sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, la manzanilla es un aliado para el cuidado de la piel, especialmente la sensible o irritada. Puede calmar las rojeces, reducir la inflamación y proteger la piel.
Alivio de malestar leve
La manzanilla también es conocida por su capacidad de aliviar dolencias leves, como cólicos, dolores de cabeza suaves y molestias estomacales, ofreciendo un alivio natural y reconfortante.
Otras recomendaciones
- La manzanilla es segura para la mayoría de las personas, pero no debe considerarse un sustituto de tratamientos médicos. Siempre es recomendable consultar con un especialista si tienes alguna condición específica o tomas medicamentos.
- Aunque la manzanilla puede complementar el cuidado del cuerpo y mejorar el bienestar diario, recuerda que no es un tratamiento principal, sino un apoyo para tu rutina de salud.
- Si disfrutas de la manzanilla, considera incluir otras hierbas que complementen sus efectos, como la menta o la cúrcuma.
- Prueba productos con extractos de manzanilla para la piel o el cabello, especialmente si tienes piel sensible o buscas una solución natural para calmar irritaciones.