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Tipos de lesiones musculares habituales, diagnóstico y tratamiento.

Tanto en las actividades diarias como en el deporte, las lesiones musculares son habituales. En el lado opuesto, el...
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Tanto en las actividades diarias como en el deporte, las lesiones musculares son habituales. En el lado opuesto, el sedentarismo, también puede llevarnos a lesionarnos debido a la pérdida de masa muscular por falta de actividad física y ejercicio. Uno de los tratamientos actuales para combatir las lesiones musculares es el trabajo de la musculatura, tanto del CORE como de las extremidades. Vamos a conocer los tipos de lesiones musculares y su clasificación según causas y gravedad. Así como el diagnóstico de las lesiones musculares y el tratamiento por fases hasta la completa recuperación.  

Características de las lesiones musculares

La principal función de los músculos es contraerse y elongarse para así poder generar movimiento y realizar nuestras funciones. El movimiento está controlado por nervios periféricos y también se ven implicados tendones, ligamentos y articulaciones.

Los músculos esqueléticos son los que están unidos a los huesos y los que obedecen nuestras órdenes conscientes, es decir, los movimientos voluntarios. Están formados por fibras musculares muy alargadas.

Las lesiones musculares son muy frecuentes y pueden originar dolor en diferentes zonas del cuerpo. Solo en el mundo del deporte, suponen más del 30% de todas las lesiones deportivas.

Sabías que…

En el fútbol la incidencia de lesiones musculares es más alta que en otros deportes, como el baloncesto o el balonmano.

Las lesiones musculares producen microhemorragias locales. A las 4 o 6 horas aparece inflamación y edema y a la semana (puede haber variaciones en función de la lesión y localización) predomina la proliferación de tejido fibroso sobre la reacción inflamatoria. La regeneración alcanza su máxima actividad entre la segunda y la cuarta semana.

Tipos de lesiones musculares

Las lesiones musculares se clasifican en directas (o extrínsecas) o indirectas (o intrínsecas).

Lesiones directas

Se clasifican según la gravedad en su estructura en leves o benignas (grado I), moderadas (grado II) o graves (grado III). Se deben a un traumatismo, contusión o golpe directo de la masa muscular contra una superficie dura y el hueso. Son frecuentes en deportes de contacto y accidentes automovilísticos.

lesiones musculares gemelos

Lesiones musculares indirectas

Se producen por una contracción repentina del músculo. Influye la fatiga local del músculo, la fuerza y velocidad de la tensión.

Las lesiones musculares indirectas aparecen como un dolor repentino, en forma de tirón o pinchazo. En deportistas, se relaciona normalmente con un sprint – por ejemplo, en corredores-, un cambio de ritmo o un chut.

Se clasifican en:

  • Contractura muscular y/o DOMS (delayed onset muscle soreness) (grado 0): son las populares “agujetas”. Se consideran más un mecanismo de adaptación que una lesión verdadera. Da lugar a signos como edema entre fibras musculares y aumento de la vascularización que afecta a los vasos sanguíneos locales. Los signos y síntomas duran de 1 a 3 días.
  • Distensión muscular (grado I): ocurre cuando el músculo es elongado hasta su límite máximo. El dolor no se da en un punto preciso de mayor sensibilidad. Clínicamente es indistinguible de un calambre muscular. Presenta un claro defecto muscular con hematoma que dura de 3 a 15 días.
  • Desgarro muscular parcial (grado II): es una lesión extensa que ocurre por elongación del músculo más allá de su máximo de elasticidad. Aparece como un chasquido con dolor localizado. La recuperación requiere de 3 a 8 semanas.
lesiones musculares isquiotibial
  • Desgarro muscular completo (grado III): es una rotura importante o completa del músculo. Se da una separación completa de los cabos que se retraen. Durante 8 a 12 semanas, la funcionalidad de las fibras musculares será insuficiente. Incluso puede presentar un muñón evidente y palpable mediante un examen físico.

Lesiones musculares más habituales

Las lesiones musculares en las extremidades afectan con mayor frecuencia a cuádriceps, isquiosurales, gemelos y aductores. La columna lumbar también es frecuentemente lesiva, tanto en las actividades de la vida diaria como en el deporte. Por ello, también es frecuente que las lesiones musculares afecten a la pared abdominal, glúteos, pectoral, músculos del brazo y antebrazo.

  • Lesión del cuádriceps: el músculo recto femoral es uno de los 4 músculos del cuádriceps. Se sitúa en la cara anterior del muslo, es el que da el relieve muscular. Su función principal es la extensión de la rodilla. Por ello, el chute es una de las causas características de esta lesión.
cuádriceps disparo balón
  • Lesión de los músculos isquiosurales y músculos isquiotibiales: los isquiosurales se encuentran en la parte posterior del muslo y están formados por el bíceps femoral, el semitendinoso y el semimembranoso. Su función principal es la flexión de rodilla. Son dos los mecanismos de lesión:
    • Por contracción excéntrica.
    • Por hiperestiramiento.

Aparece como un chasquido (tirón) con dolor muscular.

estiramiento pierna
  • Lesión de gemelo: en la cara posterior de la pantorrilla se encuentra el tríceps sural compuesto por 3 masas musculares que juntas forman el tendón de Aquiles. Su función principal es la flexión plantar del pie. El mecanismo de lesión principal se da al comienzo de un impulso cuando el músculo se encuentra en máximo estiramiento pudiendo producirse rotura fibrilar.

Sabías que…

La lesión muscular del gemelo medial se conoce como tennis leg por su alta incidencia en dicho deporte.

dolor muscular tenista

Aparece con el conocido como “síndrome de la pedrada” ya que, los que la padecen, con frecuencia explican que algo les ha golpeado la pierna. El dolor muscular es fuerte e impide apoyar la pierna afectada con la consecuente cojera. Pueden aparecer hematomas de gran tamaño.

  • Lesión de los aductores: los músculos aductores son un grupo de músculos situados en la cara interna del muslo. Su función principal, como indica su nombre, es la aducción de la cadera. Es decir, el movimiento por el cual el músculo va de afuera hacia adentro. Su lesión principal es por un movimiento forzado con cambio de ritmo o dirección que provoca dolor muscular.

Dolor en la zona lumbar

El dolor en la zona de la columna es una patología frecuente en nuestra sociedad actual y en deportes que conllevan movimientos repetitivos y que implican rotación, extensión e inclinación del tronco. La columna es inestable de por sí y depende de la musculatura profunda para tener estabilidad. Esta musculatura puede verse afectada por fatiga y provocar que la musculatura superficial trabaje más y al sobreesfuerzo, llevando a limitación articular y dolor:

Entre las patologías, destacan por su frecuencia:

  • Cervicalgias: Dolor en la región posterior del cuello por tensión muscular sostenida. Puede causar dolor de cabeza y brazos.
dolor contractura cuello
  • Dorsalgia: Dolor en la zona dorsal de la espalda por la mala postura al trabajar con el ordenador.

Diagnóstico de las lesiones

El diagnóstico de las lesiones musculares debe ser realizado siempre por un médico especialista. Se basará especialmente en los síntomas y en la exploración física (signos externos, palpación, evaluación del dolor en la contracción del músculo afectado, valoración de la flexibilidad…). También valorará el historial del paciente afectado.

En clínica, también se pueden realizar estudios de imagen del músculo afectado mediante ecografía musculoesquelética y resonancia magnética. Estos estudios permiten confirmar el diagnóstico y obtener información exacta de lesión muscular y el daño en tejidos afectados. Permiten conocer la gravedad de la lesión, si hay rotura muscular, la longitud de la herida y el pronóstico de los días de baja.

prueba diagnóstica dolor muscular

Tratamiento de las lesiones musculares

El tratamiento de las lesiones musculares está basado en 3 fases: aguda, subaguda y reanudación de la actividad. Para progresar de una fase a otra, se deben alcanzar unos criterios que indican que el músculo está preparado para un estímulo superior. Por tanto, la duración de las fases depende de cada persona y cómo progrese.

  • Tratamiento de las lesiones musculares: primera fase (aguda)

Durante las primeras 48-72 horas es prioritario reducir el edema y la inflamación. Para ello, se aplica el denominado método RICE, es decir: Rest (reposo), Ice (hielo o frío local), Compression (compresión) y Elevation (elevación).

tratamiento lesión muscular pierna

El reposo previene retracciones de la rotura. La aplicación de hielo local contribuye a reducir el hematoma, la inflamación y acelerar la recuperación. La compresión mediante vendaje minimiza el flujo sanguíneo y, por tanto, el hematoma que se forma. La elevación de la pierna ayuda al retorno venoso y a la disminución del edema.

La aplicación de hielo local contribuye a reducir el hematoma, la inflamación y // 1)como consecuencia, acelera el proceso de la recuperación. //  2) acelera la recuperación

La compresión y la aplicación de frío local se suelen combinar repitiendo intervalos de 15 a 20 minutos de duración cada 3 o 4 horas, aproximadamente.

Bajo supervisión médica, se pueden utilizar fármacos analgésicos.

Tratamiento de las lesiones musculares: segunda fase (subaguda)

  • Activación muscular: A partir del tercer día, es importante empezar con la activación de la parte afectada si la primera parte ha pasado correctamente y sin complicaciones. Se empieza con ejercicios isométricos. La intensidad será gradual teniendo en cuenta la tolerancia al dolor. Progresivamente, se irán introduciendo ejercicios concéntricos y excéntricos hasta adquirir una fuerza igual a la previa a la lesión.
    • Estiramientos: es importante ir ganando todo el rango de movimiento progresivamente sin causar dolor. Estirar el músculo lesionado mejora sus condiciones viscoelásticas y disminuye el riesgo de padecer cicatrices fibrosas y otras secuelas.
    • Trabajo de estabilización: destinados a mejorar la estabilidad del CORE.
    • Terapia física: Las más utilizadas en fisioterapia son:
      • Electroterapia: para favorecer el correcto funcionamiento muscular.
      • Temperatura: ultrasonido, hipertermia o diatermia.
    • Trabajo cardiovascular: siempre que no haya dolor o sea una molestia soportable. Estos ejercicios pueden realizarse en piscina, bicicleta estática o elíptica según la movilidad que permita la parte dañada. Progresivamente se empezará la carrera continua, los cambios de ritmo y de sentido.
tratamiento lesión hombro

Tratamiento de las lesiones musculares: tercera fase (reanudación de la actividad)

Esta fase está enfocada a la vuelta progresiva del deportista al deporte específico que se practica. Es importante que la transición sea gradual, con un calentamiento adecuado, comenzando por ejercicios que imitan los movimientos propios del deporte específico y asesorado por un profesional con formación.

ejercicios prevención lesiones

El alta se dará cuando se determine que se pueden soportar las cargas de la actividad o práctica deportiva después de la lesión y una vez superadas las fases de recuperación. Para el retorno a la competición o pruebas es importante también estar preparados desde el punto de vista mental.

Durante el proceso de recuperación, también es importante seguir una dieta equilibrada rica en macronutrientes, como proteínas, y minerales como el magnesio o el potasio. Así como utilizar productos específicos para acelerar la curación de heridas en casos en que la piel se haya visto afectada.

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Sobre el autor: Carmen Bauzá

Sobre el autor: Carmen Bauzá

Farmacéutica especializada en formación y comunicación en Industria Farmacéutica: salud, belleza y autocuidado.

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